A sus 13 años, Marcos Valsera se ha convertido en un referente de superación personal y deportiva en el Hujase Jaén Paraíso Interior. Forma parte de nuestra Federación Andaluza de Deportes para Personas con Discapacidad Intelectual, y ha conseguido destacar tanto por su nivel competitivo, (es el quinto de España en su categoría), como por su actitud y entrega dentro y fuera de la pista.

Durante la reciente jornada de puertas abiertas del club, Marcos asumió un papel muy especial. Actuó como voluntario en una actividad destinada a adultos con enfermedades neurodegenerativas, compartiendo sus conocimientos básicos de tenis de mesa y demostrando iniciativa, empatía y autonomía. Fue una muestra más del carácter inclusivo del proyecto que lidera el club jiennense.

Francisco Javier Valsera, su padre, destaca que el crecimiento de Marcos ha sido posible gracias al trato equitativo desde el primer día: «Entrena con el mismo calendario, la misma exigencia y las mismas oportunidades que sus compañeros, y eso ha sido clave en su evolución».

Además, reflexiona sobre el verdadero significado de la inclusión: «Siempre me dijeron que se basa en la presencia, el progreso y la participación. Pero ahora sé que también es un viaje de ida y vuelta, donde todos aprendemos algo».

Alfonso Alejo, director del club, recuerda que Marcos se incorporó a la cantera en los inicios del proyecto, y destaca su carácter afable, su fuerza interior y el cariño que despierta en todos. Ahora, además de jugador, es una pieza activa en el programa de voluntariado del club, demostrando que el deporte puede ser un puente hacia una sociedad más justa y humana.

«La discapacidad no marca los límites; lo hacen las oportunidades», concluye su padre. La historia de Marcos es una lección viva de lo que puede lograrse cuando se apuesta por una inclusión real, desde el respeto, la igualdad y el compromiso.